Picamos la cebolla muy fina y la ponemos a pochar con un poco de aceite. Añadimos el tomate pelado y cortado en dados y sin pepitas. Dejamos estofar todo durante 20 minutos. Añadimos los 200 gr de Txangurro, flambeamos con la copa de brandy y lo movemos todo con una espátula para que no se pegue ni se seque y reservamos.
En una cazuela amplia y no muy alta, hervimos agua salada para cocer las láminas de lasaña durante unos 9 minutos, hasta que estén casi en su punto, revolviendo de vez en cuando. Una vez cocidas, las pasamos por el grifo, las escurrimos y las depositamos sobre un plato, untada previamente con un poco de aceite, para que no se peguen.
Colocamos en la base del plato una lámina de lasaña, ponemos sobre la lámina una cucharada de txangurro, y una cucharada de salsa de tomate, sobre ella otra lámina de lasaña, y otra cucharada de txangurro y salsa de tomate, repetimos la misma acción hasta conseguir el grosor deseado.